El secretario de Estado estadounidense Anthony Blinken se reunió este 3 de octubre con el presidente colombiano Gustavo Petro, en la primera escala de una gira que también lo llevará por Chile y Perú. Los dos mandatarios abordaron varios temas. Durante la primera reunión del presidente de Colombia, Gustavo Petro, y el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, se trataron temas como la implementación del Acuerdo de Paz de 2016 con la otrora guerrilla de las FARC, la protección de los migrantes venezolanos, y la lucha antidrogas. Apertura al debate En esta oportunidad, ambos gobiernos señalaron que comparten la idea de avanzar hacia una nueva política antidrogas que vaya más allá de la represión de la producción y el consumo. Según el politólogo colombiano Fernando Posada, la lucha antidrogas es uno de los temas más importantes en los que América Latina está construyendo un discurso conjunto: “Perú, Bolivia, Colombia, Chile, Argentina son países que han adoptado sus discursos profundamente críticos de lo que ha sido la guerra antidrogas liderada por Estados Unidos desde los años 70. Y en ese sentido, la visita de Blinken va a ser en gran parte una apertura a ese debate que Colombia quiere liderar, y que ha tenido pendiente liderar por más de 40 años, desde que empezamos a perder esa guerra antidrogas que no nos trajo nada distinto a sufrimiento, a corrupción, a muerte, y que aun así no hemos querido abrir como nación ante la comunidad internacional”, subraya. Chile y Perú son los otros países en la lista de visita del secretario de Estado. El analista considera asimismo que la visita de Blinken a Sudamérica busca algo más que definir una agenda común: “Lo que Estados Unidos busca hacer con este tipo de acercamientos es también quitarle influencia a Rusia, a Irán y a China en América Latina y recuperar algo de influencia en esta región que trascienda la política”. Recuperar influencia “También tiene que aprovechar que, en ese momento de gobierno demócrata, la tensión es mucho más baja que con gobiernos como Trump o Bush Junior, donde la tensión con América Latina era absolutamente mayor. No trascendían los temas militares y de política de drogas, algo que cambia con los gobiernos demócratas, como Biden y Obama, que suelen ser gobiernos con acercamientos con América Latina”, prosigue Posada. “Además, es una forma pragmática de Estados Unidos de entender que América Latina está dando un giro hacia la izquierda, un mayor al que se vio en la primera década del siglo 21”, concluye el politólogo. Este lunes, Gustavo Petro aprovechó para pedirle a Blinken que Estados Unidos corrija la "injusticia" que cometió con Cuba al incluirla en la lista de naciones que apoyan el terrorismo por haber prestado su territorio para negociar la paz con rebeldes colombianos. El 6 de octubre Anthony Blinken viajará a Lima para participar en la Asamblea General anual de la Organización de los Estados Americanos (OEA), el principal foro político de la región.