RFI entrevistó a Perla Martinez, hermana de Jorge Luis Martínez Valdez, uno de los 10 mineros atrapados en Coahuila. Trece días después de ocurrida la tragedia, la angustia se prolonga para los familiares de los obreros que quedaron aprisionados tras el derrumbe de un pozo de carbón en el municipio de Sabinas. "Ya han pasado muchos días. (Los rescatistas) nos dicen: ‘ya vamos a bajar, el agua está bajando, las máquinas esto, las máquinas lo otro'. Es una espera muy difícil. Por eso levantamos la voz el sábado. Nos juntamos seis familias y salimos a los medios a pedir ayuda. Pedimos más maquinaria'. Esto dice a RFI Perla Martínez, hermana de Jorge Luis Martínez Valdez, uno de los 10 mineros atrapados en Coahuila. Pero, ¿sigue ella albergando esperanzas de encontrarlos con vida? "La esperanza primeramente es Dios. Pero pues ya es menos la esperanza de que ellos se encuentren con vida. Ya han pasado muchos días". Los familiares se turnan día y noche a las puertas de la mina. No solo piden más maquinaria especializada, sino también personal más capacitado en este tipo de operaciones de rescate. "Nosotros tememos que le den carpetazo a esto. No queremos eso. Ellos dicen: 'vamos a estarnos aquí, nosotros los vamos a sacar, pero denos tiempo'. El lunes había posibilidad de entrar porque había menos de un metro de agua. Pero no lo hicieron. No lo hicieron. Por eso estamos pidiendo ayuda. Queremos más maquinaria, gente más experta que no tenga miedo de bajar (a rescatarlos). Nosotros, como ellos, sabemos que es peligroso, pero con todo el equipo necesario, yo sé que ellos sí se atreverían a bajar. Por eso nosotros nos arriesgamos a pedir ayuda a través de ustedes, los medios”. ¿Y el presidente mexicano? ¿Qué piensa de la visita de López Obrador? "Pues estuvo ahí, verdad, pero no habló con la gente lo que tenía que hablar, no fue capaz de darle aliento y ánimo a la gente, verdad. No queríamos que cada uno se pusiera a llorar, sino que nos diera esa esperanza de que aquí no iba a pasar lo mismo que en Pasta de Conchos". "Pasta de Conchos". Así es conocido otro desastre minero ocurrido en 2006 en la región: 65 mineros quedaron sepultados en esa ocasión. Desde entonces, los familiares exigen el esclarecimiento de lo sucedido. Recién ahora y tras haber pasado a instancias de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, el gobierno mexicano se vio obligado a iniciar una excavación exhausta con la intención de buscar los cuerpos. Esta operación debería concluir en agosto de 2024.