En el departamento colombiano del Chocó, el río San Juan que desemboca en el Pacifico es la carretera por la que la cocaína sale al mundo. Un barco hospital financiado por la Unión Europea y gestionado por "Médicos sin fronteras ", brinda asistencia sanitaria a las poblaciones aisladas de esa región, donde hace una semana, el gobierno y ELN acordaron medidas humanitarias urgentes. Pero horas después, fue escenario de un ataque del Clan del Golfo seguido de un anuncio de paro armado del ELN. Ni 24 horas duró la esperanza en el Pacifico colombiano. El gobierno de Gustavo Petro y la guerrilla del ELN cerraron su primer ciclo de negociaciones de paz anunciando alivios humanitarios para dos regiones rurales del Bajo Calima y el Medio San Juan. Pero vino un ataque mortal de los narcotraficantes del Clan del Golfo y luego el anuncio del ELN de un paro armado en esta región que lleva año y medio bajo el fuego cruzado de los grupos armados * Allí estuvo Marie Normand enviada especial de RFI. Un reportaje adaptado por nuestra redacción. Lucile, una de las habitantes de la zona, a punto de dar a luz, explicó a RFI: "Sería bueno que el presidente llegue a un acuerdo, la situación va a seguir empeorando. Nosotros los campesinos, los indígenas, sufrimos mas que la gente en los pueblos"