Al menos 33 personas que participaron en las manifestaciones del 11 de julio de 2021 en Cuba son juzgadas esta semana por el delito de "sedición" en un tribunal de La Habana, entre ellos seis menores de 18 años. Un juicio que ha provocado nuevas críticas de los defensores de los derechos humanos contra el gobierno de La Habana. Los 33 detenidos van a ser juzgados por su participación en las manifestaciones del 11 de julio de 2021 en Cuba, que reclamaban un cambio radical en el gobierno de la isla. Se los acusa en particular de haber tomado parte en una trifulca callejera en La Habana, que dejo daños materiales y heridos. Según Juan Pappier, de la ONG Humans Right Watch, detras de este juicio solo está la represión política. “Pocas veces en la historia reciente de América Latina habíamos visto una criminalización tan masiva y tan sistemática de la protesta pacífica como está ocurriendo actualmente en Cuba, señala el investigador de HRW. “Además, en estos procesos judiciales se viola flagrantemente los estándares internacionales en materia de derecho de asociación, de libertad expresión y de debido proceso. Son procesos judiciales adelantados por tribunales que carecen de toda independencia, donde se está persiguiendo el disenso, donde se están violando garantías básicas. Todo esto con el objetivo evidente de generar terror en la población cubana y de enviar un mensaje de que lo que ocurrió en julio, ese alzamiento pacífico y popular por la libertad en Cuba, está prohibido y nunca más puede ocurrir”. Entre los enjuiciados esta semana en Cuba hay varios menores de edad, que son considerados adultos y por lo tanto responsables penalmente por la justicia cubana. Una situación inaceptable para Juan Pappier. “Es realmente escandaloso que el gobierno cubano esté persiguiendo a menores de edad. Sabemos que hay decenas que están presos actualmente en el país y que muchos están siendo tratados como si fueran adultos en procesos penales abusivos donde se violan sus derechos como niños, establecidos en los tratados internacionales de derechos humanos. Realmente es muy diciente sobre la falta de tolerancia del régimen y sobre lo débil que se siente frente a la crítica. Que las autoridades judiciales en el país estén persiguiendo a menores de edad que en muchos casos no han hecho más que ejercer su derecho de libertad de expresión”. Hasta el momento han sido enjuiciadas ya 790 personas en Cuba por las históricas manifestaciones de julio de 2021, de las más de 1300 que fueron detenidas. El gobierno de La Habana acusa a Estados Unidos de estar detrás de lo que considera ser un intento de desestabilización.