RFI entrevistó a Mariana Aparicio, profesora de Relaciones Internacionales de la UNAM, sobre la Cumbre Inmigración realizada en el sitio arqueológico de Palenque, en el sureño Estado mexicano de Chiapas. Una decena de países latinoamericanos pidieron a las naciones que reciben migración irregular como Estados Unidos, pero sin mencionarlo, que revisen su política migratoria. Entre los 13 puntos del comunicado final de la Declaración de Palenque figuran el de exhortar a los países destino a que abandonen políticas y prácticas que vulneren los derechos humanos de los migrantes y replantear la deuda externa. Muy notable ha sido la ausencia de Estados Unidos en esta reunión. Para Mariana Aparicio, profesora de Relaciones Internacionales de la UNAM, esto podría significar el deseo de los vecinos del Sur de tener su propia política migratoria."Si bien es cierto que Estados Unidos no fue invitado, eso podría sugerir que es una iniciativa propia del Estado mexicano para tener un nivel de interlocución y diálogo con sus pares en América Latina y el Caribe. Todo parece indicar que se trata de una propuesta del gobierno mexicano para recordarle a sus vecinos del Sur que existen una serie de proyectos y programas y que México está en posición de cooperar y apalear la crisis migratoria. Por supuesto que hay que celebrar este diálogo entre los países, pero a partir de los resultados de la cumbre, pues parece que no hay nada nuevo que no se haya dicho anteriormente", dice Aparicio.Estados Unidos comenzó a externalizar este año su control migratorio con las llamadas oficinas de Movilidad Segura, que ya funcionan en Guatemala y Colombia. Estas nuevas medidas son criticadas por la forma en que son seleccionados los migrantes, pero la Cumbre en Palenque no ofreció ninguna alternativa, según Mariana Aparicio."A mí no me parece que esta Cumbre esté dando una opción alternativa porque al final lo que busca los migrantes es llegar a Estados Unidos, independientemente de dónde estén esperando para la cita", subraya la profesora de la universidad mexicana UNAM.Cuba y Venezuela pidieron el levantamiento de sanciones económicas, pero Estados Unidos difícilmente aceptaría esta propuesta, analiza también Mariana Aparicio."Las sanciones económicas que implementa Estados Unidos responden a una decisión de política interna de ese país. Es muy complicado establecer, obligar o que exista una modificación de la política interna de Estados Unidos respecto a uno de los instrumentos económicos y comerciales que tiene ese país para implementar en otro país y que modifique su comportamiento. La Asamblea General de Naciones Unidas, año tras año, el 98% de los países miembros, votan en una resolución para exhortar al gobierno de Estados Unidos a eliminar las sanciones económicas. Lo que se conoce comúnmente como ‘el bloqueo’. Pero Estados Unidos no ha hecho caso a lo que la comunidad internacional expresa", concluye.El mandatario mexicano anunció que en su próxima reunión con Joe Biden, programada para noviembre, le pedirá levantar las sanciones por razones humanitarias.