La Guardia Nacional mexicana desarticuló este martes una caravana migrante que planeaba salir con 2.000 personas desde Tapachula, frontera sur hacia Estados Unidos. Los migrantes estaban en el parque central de Tapachula y capturado con la promesa de que se les iba a otorgar documentos para regularizar su estadía en territorio mexicano. La Guardia Nacional, junto a miembros de la Instituto Nacional de Migración mexicano, procedieron al arresto afirmando que los migrantes podrían acudir a un permiso de estadía en el estado de Tapachula. Sin embargo, esta opción no es viable en una ciudad colapsada por los migrantes varados, según Soraya Vázquez, subdirectora de la ONG Binacional "Al otro Lado", quien deplora el uso del término “desarticulación”. “Las autoridades han estado utilizado siempre una serio de eufemismos para esta política de contención en la frontera sur”, señala. “Hubo cambios en la ley de la Guardia Nacional y habilitaron también al cuerpo policial para que, junto con el Instituto Nacional de Migración, generaran esta contención a las caravanas por la presión que Estados Unidos ha ejercido a México de pedirle que evite que todos estos miles de personas solicitantes de asilo lleguen a la frontera norte de México. Esto ha venido sucediendo desde hace tiempo: que las personas que vienen migrando de Sudamérica, Centroamérica y otros países llegan a la frontera de México y ahí en Tapachula son retenidos. Se ha vuelto una ciudad-estación migratoria”, agrega. Por este motivo, la han apodado la “ciudad cárcel”. “Es un centro donde detienen a los migrantes y no hay condiciones, como espacio para dormir, para brindarles la atención humanitaria que requieren”, denuncia Vázquez. Mientras tanto, las autoridades mexicanas trasladaron a los migrantes a una estación llamada Siglo 21 para invitarlos a tramitar su forma migratoria múltiple, un documento que les permite permanecer en el territorio de México. “Ese documento es el que se le expide a una persona que viaja a México como turista en los puertos de entrada al país. Las autoridades seguramente los llevaron a una estación migratoria, pero no para expedirles un documento que les permita circular libremente. Eso es lo que los migrantes quisieran, pero las autoridades en México no están facilitando eso, porque lo que quieren es evitar que la gente llegue al norte de país. Así que van a estar en esa estación migratoria, les van a expedir un oficio de salida en el que les dicen ‘tienes 20 días para regularizar tu situación en el país o salir”, afirma la subdirectora de la ONG Binacional "Al otro Lado". La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de México detuvo a más de 2,76 millones de indocumentados en la región.