En Chile, el gobierno de Gabriel Boric está bajo críticas del sector ambientalista tras haber aprobado el lunes un controvertido proyecto de minería. Greenpeace y otras ongs temen que al ampliar la mina Los bronces en la cordillera de los Andes se agraven problemas de abastecimiento de agua y se destruyan los glaciares de forma permanente Las organizaciones ambientalistas están en pie de guerra ante la decisión del Gobierno chileno de Gabriel Boric, que ha aprobado el proyecto Los Bronces Integrado de Anglo American, la compañía minera con sede en Londres. De forma unánime y bajo ciertas condiciones, el gobierno chileno dio luz verde al proyecto denominado Los Bronces Integral, que consiste en ampliar la explotación de yacimientos de cobre en la región metropolitana y en Valparaíso, sobre la cordillera de los Andes. Una contradicción según Matías Asún, director de Greenpeace Chile. "Muchas de las acciones elevan material particulado, polvo, y ese polvo al depositarse sobre la superficie de los glaciares, hace que el glaciar cambie y aumente el deshielo. Se trata de glaciares que alimentan el sector oriente de nuestra capital que es el que más agua utiliza. Se le dan proyectos a grandes empresas cuyo nivel de uso de recursos hídricos es altísimo y eso afecta a la disponibilidad de agua de las personas". Asún denuncia en la antena de RFI que esto va contra los compromisos adquiridos del propio Boric. La explotación ya estaba en funcionamiento. El gobierno dice haber aceptado la propuesta por las medidas de compensación ofrecidas por la minera. "Todas las comunas que están tienen hoy problemas de calidad y de disponibilidad del agua y gastan presupuestos millonarios en camiones. Fundamentalmente las medidas en las que el gobierno se apoyó ipara señalar ban asociadas al barrido de calles y a la importanción de calefactores eléctricos para remplazar el uso de leña en esa zona empobrecida dodne el material más barato es la leña. Hay una de esas compensaciones asociadas al nivel de deterioro de los glaciares. (...) No hay ningún daño sobre glaciares que no sea irremediable", señala Matías Asún. La decisión fue tomada por un comité de ministros compuesto por seis carteras el lunes por la noche y revierte el rechazo del Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) del 2 de mayo de 2022, que argumentó que la iniciativa tendría impactos en la calidad del aire de Santiago de Chile, una de las que sufre de mayor polución en el país sudamericano.