'Me han convencido de que soy el candidato. Voy a ser candidato. Me han obligado', dijo el ex presidente Evo Morales sobre su candidatura presidencial para 2025. El silencio del presidente Luis Arce sobre sus propias intenciones de ser reelegido suscita interrogaciones. RFI entrevistó al politólogo Marcelo Arequipa sobre lo que pasa en el MAS. Manuel Terradillos, RFIEl ex presidente boliviano Evo Morales no ocultaba sus intenciones hace unos días de convertirse en candidato en 2025. El congreso que su formación, el Movimiento al Socialismo (MAS), inicia este martes puede servir para escenificarlas.La reunión llega en plena división entre los seguidores del ex presidente y líder de la formación, motivado para presentarse a los comicios de 2025, y los del actual presidente Luis Arce, quien no ha indicado si buscará la reelección.La ruptura es tal que los Arcistas no conceden legitimidad a la cita. De hecho, el propio Luis Arce no asistirá. En 2024 tendrán lugar las elecciones primarias para determinar a los candidatos. ¿Qué buscan los seguidores de Evo Morales, el Evismo, con la organización de este congreso?"Quieren cerrar filas en torno a la candidatura de Evo Morales, es decir, garantizar su candidatura para el 2025", dice a Radio Francia Internacional el politólogo Marcelo Arequipa. "El Evismo no está dispuesto a esperar al año 2024, momento en el que se tienen que llevar adelante las primarias electorales en Bolivia y se necesita tener sellada y certificada la posibilidad de que solamente Evo Morales va a ser candidato", agrega.Pero, ¿por qué Luis Arce no confirma su candidatura? ¿Qué está esperando?"Luis Arce tiene que jugar ahora mismo una suerte de malabarismo. Por un lado, a la población en general tiene que mandarle el mensaje de que está preocupado por los temas de gestión y no por la discusión interna dentro del MAS ni por su posible candidatura presidencial. Si la gente comienza a percibir que Luis Arce quiere ser candidato, que quiere aspirar a la reelección, en ese momento se generaría otro tipo de problema, pues una parte de la población podría alejarse del presidente Luis Arce y quitarle respaldo", sostiene.Para Marcelo Arequipa, esta ruptura se mantendrá hasta las primarias, aunque no cree que pase excesiva factura al MAS en cuanto a una posible desafección de sus seguidores."Es posible que para un sector del votante del MAS, el sector, digamos, simpatizante, pero que no está tan cerrado en términos de militancia, esto puede generar cierta desafección con ese partido político. Pero para que se genere esa desafección, esto tendría que venir acompañado de una propuesta alternativa. En contraparte, es decir, en el bloque de las posiciones políticas, tiene que haber una alternativa y, al menos por ahora, ésta no existe", sostiene Marcelo Arequipa.Arequipa no descarta que una parte del MAS quiera tratar de buscar una salida anticipada de Luis Arce del poder, pero considera igualmente que la situación social en el país no es tan negativa como para poder provocar una caída del presidente.