La Justicia chilena dictaminó que 31 de los 33 mineros atrapados en la mina de San José en 2010 recibirán indemnización por su traumática experiencia. Dos mineros no se unieron a la demanda. “Tengo el privilegio de informarles que todos los mineros rescatados, incluyendo el señor jefe de turno, don Luis Urzúa, están en perfectas condiciones”: de este modo se anunciaba en 2010 el final de la operación de rescate del accidente minero más mediático que se recuerde en América.Trece años después, 31 de los 33 trabajadores que pasaron 68 días atrapados en la mina San José, a 720 metros de profundidad, recibirán una indemnización por parte del Estado chileno. Fue la resolución de un juicio bastante largo y complejo que estableció finalmente la responsabilidad del Gobierno en el accidente que sepultó a los mineros de Atacama.“Resguardar las medidas de seguridad”“Nos pone contentos que se logre establecer que en este caso no solamente existía responsabilidad de los entes privados, sino también de los entes públicos, cuya finalidad es resguardar las medidas de seguridad, y que en este caso no se habría cumplido. Y por eso nos deja contento el fallo, que es un fallo no común dentro de la jurisprudencia chilena y permite establecer la responsabilidad del fisco en los hechos”, comenta a RFI el abogado de las víctimas, Jorge Ríos.El Estado de Chile deberá pagar en total 1,4 millón de dólares, es decir unos 46 mil dólares a cada minero: “Lo fijado por el tribunal de segunda instancia, en este caso la Corte de Apelaciones de Santiago, es de 40 millones de pesos chilenos, y eso lo deberían recibir por medio de un procedimiento interno que se gestiona para el cobro, en este caso en Chile, en aproximadamente tres, cuatro meses, que es lo que se demora internamente el Estado de Chile en pagar”, detalla el abogado.Tantos años después del accidente, la mayoría de los mineros involucrados habían perdido la esperanza de percibir una indemnización, que fue recibida con agrado y sorpresa. Según Jorge Ríos, “los 31 mineros de los 33 que accionaron en contra del Estado estaban contentos, principalmente porque se había logrado establecer que en este caso no era el único responsable la empresa, la minera San José, sino que también había negligencia, lo que se conoce también como falta de servicio, por parte de los órganos públicos chilenos, quienes no salvaguardaron el cumplimiento de las medidas de seguridad dentro de la mina”.“Cambio en sus vidas”A pesar de poner punto y final de manera jurídica, los mineros supervivientes de la mina San José tendrán difícil poner un epilogo a un accidente que les cambió sus vidas para siempre. “Este hecho difícilmente pueda ser olvidado. Por el contrario, todos han sufrido un cambio en sus vidas. Han tenido que abandonar la profesión que ellos tenían, que era de mineros. Actualmente la mayoría se dedica a otras actividades. Si bien judicialmente se terminaría el tema para ellos, personalmente este hecho continúa”, subraya su abogado.Luis Bustos y Juan Illanes fueron los únicos dos de los 33 mineros de Atacama que decidieron no sumarse a la demanda contra el Estado por decisión personal.