La Asamblea Nacional francesa ha fijado sus líneas rojas para aprobar un eventual acuerdo comercial entre la Unión Europea y el Mercosur, contra el que se posicionaron la mayoría de grupos. La presión del sector agrícola sobrevuela el debate. Todos los grupos expresaron su apoyo a los agricultores franceses. Por 281 votos a favor y 58 votos en contra, los diputados urgieron al gobierno de Macron a decir a la Comisión Europea su oposición al pacto si no respeta varios criterios sanitarios, ambientales y climáticos. Los diputados piden que los agricultores sudamericanos respeten las mismas reglas ambientales y sanitarias que en Europa y una cláusula para suspender su aplicación si los países del Mercosur no respetan el Acuerdo de París sobre clima. En Francia, la presión del sector agrícola sobrevuela el debate, como quedó reflejado en el debate en la Asamblea donde todos los grupos expresaron su apoyo a los agricultores franceses.Entrevistada por RFI, Marie Pochon, diputada de Los Verdes señala: "Se trata de un tratado comercial que está en negociaciones desde hace 25 años y cuya entrada en vigor podría agravar la actual crisis climática. La deforestación, por ejemplo, podría aumentar un 25% en la Amzonía brasileña, el pulmón del planeta, y ni hablar de los daños que puede causar a la biodiversidad. Y también este tratado tendría consecuencias terribles para los agricultores de ambos lados del Atlántico". El Mercosur -Brasil, Argentina, Paraguay y Uruguay- alcanzó en 2019 un acuerdo con la UE tras más de 20 años de negociaciones, pero el pacto no fue ratificado, en parte debido a la preocupación en Europa por las políticas medioambientales del expresidente brasileño Jair Bolsonaro (2019-2022). El clima mejoró con el regreso al poder del izquierdista Lula da Silva en enero, pero las exigencias medioambientales de los europeos, contenidas en un documento adicional al acuerdo presentado recientemente por la UE, han moderado el entusiasmo."No importa cuándo se den a conocer las negociaciones de este tratado, pues por el momento no conocemos nada, nada por parte de la Unión Europea. Es por ello que nosotros votamos contra este acuerdo, que no hace más que reforzar la liberalización económica, que daña a los pueblos, los logros sociales, los servicios públicos y a los agricultores de ambos lados del Atlántico", señala Pochon en la antena de RFI. La resolución de los parlamentarios franceses, que recoge gran parte de las exigencias ya reclamadas por Macron, se produce semanas antes de una cumbre en Bruselas entre los dirigentes de la UE y de América Latina.Hernán Trujillo, profesor de la Universidad católica de Colombia y experto en la Amazonía , ha señalado en RFI: "el mecanismo de la UE es la directriz 9-95 que señala criterios muy rigurosos para poder comercializar con aquellos países que tengan altos niveles de deforestación" y explica que en tales casos debe efectuarse un seguimiento "de la cuna a la tumba" para identificar toda la cadena que circula