La Corte Suprema de Estados Unidos suprimió este viernes el derecho al aborto seguro en el país. Este fallo va a imposibilitar que varios millones de mujeres puedan decidir si ponen fin a un embarazo no deseado. Del otro lado de la frontera sur del país, las asociaciones mexicanas pro aborto llevan meses organizándose para acudir en ayuda a sus vecinas del norte. Verónica Cruz lleva dos décadas peleando por el derecho al aborto desde el muy conservador estado de Guanajuato. Al frente de la asociación que fundó, Las Libres, primero coordinó un grupo de ginecólogos que se atrevían a desafiar las leyes interrumpiendo los embarazos de las mujeres. Después, con la aparición de dos medicamentos, el Misoprostol y la Mefipristona, que permiten abortar desde casa, creó una red de acompañamiento y envió de las pastillas a domicilio. Un sistema que han adaptado en los últimos meses a las mujeres estadounidenses que vienen huyendo de las leyes restrictivas de estados como Texas. Verónica Cruz -Ya hemos desarrollado desde enero a la fecha tres logísticas. Algunas mujeres cruzan la frontera. Pueden comprar el medicamento en cualquier farmacia, sin receta médica. Es barato. Nos contactan y quieren que las acompañemos virtualmente. Otras mujeres nos solicitan el medicamento. Cruzan a la frontera mexicana con nuestras redes de acompañamiento, les dan el medicamento, regresan al territorio [estadounidense] y, ya en contacto directo, las acompañantes están en todo el procedimiento acompañándolas virtualmente. Otras mujeres prefieren hacerlo todo en México, en nuestros espacios seguros de acompañamiento y están todo el proceso con nosotras y se regresan. La mayoría de mujeres prefiere, porque es mucho más cómodo y mucho más accesible, que le lleguen los medicamentos en sus manos. Todo lo estamos haciendo de manera gratuita. Hay muchísimas personas, tanto mexicanas como de Estados Unidos, no más desde enero para acá, que han ido formando redes. Nosotras colocamos [los medicamentos] en la frontera. Se cruzan y luego se van llevando a manos de las personas que los necesitan. RFI - ¿Quiénes son las acompañantes? Verónica Cruz - Hay acompañantes en todo el país. Son unas mujeres, generalmente voluntarias todas. De hecho, las primeras veces que empezaron a funcionar eran las de las propias mujeres que tenían acceso a estos abortos acompañadas. Regresaban y nos decían “¿qué puedo hacer yo para ayudar a las otras?”. RFI - Esta red de ayuda al aborto se financia gracias a los donativos. ¿Pero temen posibles represalias judiciales desde Estados Unidos? Verónica Cruz - No primero porque en México el 7 de septiembre del 2021 se declara inconstitucional el delito de aborto en todo el territorio mexicano. O sea, no es ningún delito. Segundo, porque no nos aplican las leyes restrictivas en México y todo lo que se está proporcionando de acompañamiento. No está criminalizado el acceso a la información, el derecho a la información y el derecho a la salud. Era Verónica Cruz, fundadora de la asociación Libres, que milita por el derecho al aborto en México y ahora viene en ayuda de las mujeres estadounidenses.