Una nueva caravana de unos 11 mil migrantes venezolanos se alista para salir el 6 de junio desde el sur de México con destino a Estados Unidos. Sin embargo, la partida de este grupo se ve retrasada ya que muchos de ellos no cuentan con visas humanitarias que les permitan transitar sin problemas por territorio mexicano. Diversos colectivos sociales denuncian que este retraso trae como consecuencia se origine un tapón humano en la ciudad de Tapachula en el Estado de Chiapas. Un espacio que ya no cuenta con infraestructura para ofrecer empleo o estancia digna a una población flotante que busca el sueño americano. El estado de Chiapas ha vivido en los últimos años varios éxodos migratorios que han incluido migrantes centroamericanos, sudamericanos, africanos y haitianos. “Desde hace unos meses atrás hay una política de hacer Tapachula, una ciudad cárcel donde las personas no puedan seguir su camino o hacerlo lo más difícil posible hacia al norte. Esto se extiende más por los Estados de Chiapas, Tabasco, Veracruz, Guajaca. Hay mucho mayor número de retenes de migración y de la guardia nacional donde detienen a las personas. Hay un retraso para aquellos que solicitan asilo por la gran demanda”, declara para RFI el padre Cornado Zepeda, director del Servicio Jesuita a Refugiados México. Sobre el caso de miles de venezolanos, “atrapados” en la ciudad de Tapachula, el padre Zepeda menciona que este fenómeno se agrava con la demanda de México a inicios de 2022 de ingreso a su territorio con visa. “Ya no están llegando los venezolanos por vía área, sino vía terrestre y cruzan Venezuela, Colombia, El Darién, Panamá, Costa Rica… Centro América tratando de llegar a México. Y se topan con un muro en Tapachulas”. Si bien se ha entregado unas tarjetas de visa humanitaria válidas por un año, el padre Zepeda destaca que “no hay posibilidades mayores para los migrantes que no responden a un caso de asilo en México”. Incluso agrega que esta especie de visa es solo de tránsito, sin derecho a poder trabajar. Para el representante religioso una forma de palear este flujo migratorio seria reactivando programas de regularización migratoria. “Esto les permita de seguir de una manera regular y evitar tragedias […]No hay una propuesta única, creo que debe ser diferenciada en cada región, una propuesta mucho más fuerte de bienvenida a los migrantes”.