El presidente chileno, Sebastián Piñera, anunció que promulgará la ley que permite un tercer retiro del 10% de los fondos de pensiones durante la pandemia de coronavirus, luego de que el Tribunal Constitucional rechazara la petición del mandatario de impugnar la norma aprobada por el Congreso. Después de este cruce entre el poder ejecutivo y el legislativo los analistas hablan de una seria crisis política en Chile. El Congreso de Chile aprobó la semana pasada un nuevo retiro de pensiones de los fondos privados para que las personas puedan enfrentar la difícil situación económica provocada por la pandemia. El gobierno del presidente Sebastián Piñera se opuso y recurrió al Tribunal Constitucional alegando un factor de inconstitucionalidad. Su petición no fue aceptada, resultado que los expertos consideran como una derrota política que podría ser castigada en las urnas. “En los sectores que apoyan al gobierno o los partidos del oficialismo hay una gran preocupación”, dice a RFI el director de la escuela de gobierno de la Universidad Central de Chile, Marco Moreno. “Porque a tres semanas de una elección tan importante como es la elección de gobernadores, alcaldes, concejales y también por primera vez de los convencionales para redactar la nueva Constitución, que se van a elegir el 15 de mayo, este clima podría transformarse en un voto de castigo hacia los candidatos o a los partidos del oficialismo. Este malestar que hoy día está instalado en la opinión pública, podría expresarse electoralmente en un voto de castigo al Gobierno, que ya está siendo castigado en la encuesta. Una encuesta semanal arrojaba un 9% de aprobación al presidente Sebastián Piñera, uno de los más bajo desde el retorno a la democracia de apoyo al presidente de la República. Y esto es lo que temen el oficialismo, porque podría traducirse en un castigo electoral en las urnas en tres semanas más, dado la dificultad, la incapacidad, la tozudez del Gobierno para buscar caminos alternativos para resolver la crisis”. Por siete votos a favor y tres en contra, el pleno del Tribunal Constitucional resolvió "no acoger a tramitación el requerimiento" presentado por el gobierno contra la ley que despachó el viernes el Congreso con el apoyo de varios congresistas de derecha, parte de la coalición del gobierno. El 30 de diciembre el Tribunal Constitucional había fallado en contra de una iniciativa similar que planteaba un segundo retiro de fondos de pensiones y que fue impugnada también por el gobierno conservador, pero terminó por concretarse tras la presentación de un proyecto similar del propio Ejecutivo. Finalmente, el mandatario anunció que promulgará la ley que le permite a los chilenos un tercer retiro de hasta un 10% de los fondos de pensiones. Aunque el gobierno tenía otra estrategia muy criticada. “El Gobierno envió su propio proyecto de retiro”, dice Moreno. “Siendo una verdadera voltereta, dado que antes lo había cuestionado y en esta oportunidad decidió enviar un proyecto de su autoría para que el Congreso lo discuta. Eso genera entonces una tensión entre los dos poderes del Estado, entre el Ejecutivo y el Legislativo, profundizada por un clima que comienza a instalarse de fuerte cuestionamiento a esta nueva decisión del Gobierno. Han habido algunos incidentes que han alterado el orden público y por lo tanto, junto con la arista política que tiene esta crisis, podría agregarse un componente social. Eso es lo que genera una situación de crisis política en el país”. En la oposición le critican a Piñera no haber querido respetar desde el incio al Congreso en su decisión y varios gremios convocan para el viernes 30 de abril una huelga general. La puja entre el presidente Piñera y el Congreso tiene como telón de fondo las cinco semanas de cuarentena en gran parte del país y el resurgimiento de protestas ante la tardanza y exceso de requisitos para optar a las ayudas sociales. La oposición recrimina a Piñera que las ayudas han sido pocas, selectivas y tardías para la magnitud de las cuarentenas prolongadas que han impactado en el bolsillo de muchos chilenos de niveles socioeconómicos medios y bajos, en una postura a la que han adherido amplios sectores de su coalición de gobierno. En respuesta a la iniciativa opositora, Piñera reiteró el martes que presentará una nueva iniciativa que busca subsanar los vacíos que a su criterio deja la ley original, y por ello mantuvo su propuesta para la entrega de un bono de 200.000 pesos (285 dólares) para unos tres millones de personas, que quedaron con sus cuentas en cero con los dos retiros anteriores autorizados en julio y enero. Con AFP