Recta final para la campana electoral en Chile. Ayer se realizó el tercero y último debate con los principales aspirantes a la presidencia. Según las últimas encuestas, el candidato de izquierda y ex líder estudiantil Gabriel Boric podría calificarse para la segunda vuelta frente al ultra derechista José Antonio Kast. Un candidato cuyas declaraciones hace unos días sobre la dictadura de Pinochet causó controversias durante el debate de anoche. Por Raphael Morán, enviado especial de RFI a Santiago de Chile El candidato de extrema derecha José Antonio Kast suscitó la indignación unánime de sus rivales. El que se presenta como el heredero político del dictador Augusto Pinochet, relativizó hace unos días la crueldad de los últimos meses de la dictadura chilena: sí se seguía torturando y encarcelando a opositores antes de la elección de 1989, le recordó la candidata centrista Yasna Provoste. Kast se defendió argumentando que se había malinterpretado una declaración suya. Cuestionado sobre varios puntos de su programa ultraconservador, José Antonio Kast insistió en que quiere derogar la ley sobre el aborto, eliminar el Ministerio de la Mujer como tal, denunció la existencia de un supuesto lobby gay, pero se distanció de su propio programa en materia de medio ambiente y se dijo dispuesto a prohibir las centrales a carbón. Su principal rival y favorito de las últimas encuestas, el ex líder estudiantil y diputado de izquierda Gabriela Boric, recién recuperado del Covid, fue el otro candidato más atacado en esta noche de debate. Acusado de improvisación y calificado de candidato de la agitación social, Boric aclaró que, de llegar a la presidencia, buscaría consensos. “Yo espero liderar un gobierno que llegue a acuerdos para tener una mejor salud, que no discrimine entre ricos y pobres, para poder terminar con la lógica del sistema de AFP y entregar pensiones dignas, gobernabilidad para enfrentar la crisis climática. Esa es la gobernabilidad que nosotros proponemos porque venimos justamente de movimientos sociales”, dijo. En materia de derechos reproductivos, segundo tema del debate, todos los candidatos, salvo José Antonio Kast se mostraron a favor de una ley más liberal en materia de derecho al aborto, hasta ahora bastante restrictiva en Chile. Y fue en materia de reformas económicas que aparecieron las diferencias más notables. “Lo que decimos es que queremos un Estado mas pequeño, eficiente, austero con un gran brazo social”, afirmó Kast. “Nosotros hemos dicho que vamos a bajar de manera importante, con el acuerdo del Congreso, los tributos”, agregó. Mientras José Antonio Kast quiere reducir el perímetro del Estado, Boric propone al contrario aumentar en varios puntos la recaudación fiscal para financiar sus ambiciosas propuestas sociales. Con propuestas bastante similares, la candidata Yasna Provoste quiso diferenciarse afirmando que su programa es más serio y financiado. El aspirante oficialista de derecha Sebastián Sichel, rezagado en las encuestas, apuesta por su parte al mercado financiero para financiar la transición ecología y el nuevo sistema de pensiones. A los siete candidatos les quedan tres días de actividades electorales para convencer en lo que será, según las encuestas, las elecciones más impredecibles desde el regreso a la democracia debido al despertar del movimiento social, a la pandemia, y al surgimiento de nuevos actores políticos.