La Semana del Clima de América Latina y el Caribe llega a su fin este viernes. El objetivo fue preparar a Latinoamérica para la COP28, prevista a finales del año, en Dubái. Este jueves, 30 ministros de Medioambiente de la región elaboraron su “nueva hoja de ruta”, sin abundar en el espinoso tema de cómo financiar las acciones que limiten el calentamiento del planeta. En 2015, con la firma del Acuerdo de París, los países se comprometieron a trabajar a lo largo del siglo 21 para limitar el aumento de la temperatura del planeta en 1,5 grados. Y aunque este objetivo es necesario e inapelable, el Acuerdo de París vino a ampliar las brechas de las desigualdades, pues muchos países no cuentan ni con el capital ni con las tecnologías necesarias para abandonar el petróleo y otras energías fósiles.Perdón o canje de deudasPara Sandra Guzmán, directora de la ONG Grupo de Financiamiento Climático para Latinoamérica y el Caribe, el primer paso sería reconfigurar el sistema financiero internacional: “El tema fundamental es transformar el aparato del sistema financiero. Actualmente hay una conversación internacional sobre modificar la operación del Fondo Monetario Internacional, del Banco Mundial y de otros bancos multilaterales para que sus instrumentos de financiamiento no endeuden tanto a los países, que haya nuevas y mejores condiciones de acceso a préstamos por ejemplo, con mejores condiciones de pago, que las tasas de interés no sean tan altas y que se busque que, cuando se trate de proyectos más sostenibles, las condiciones sean todavía más flexibles, por decirlo de alguna manera. Entonces, el tratamiento de la deuda es un paso inmediato”, explica.El perdón de las deudas podría ser un instrumento financiero, así como el canje de deuda: “Es una medida importante porque, en lugar de pagar la deuda, vas a poder pagar por acciones en materia de cambio climático, ayudar a llevar a cabo algunas políticas y digamos, para algunos países que están fuertemente endeudados (por ejemplo, Argentina o algunos otros casos), que en lugar de pagar esa deuda, puedan invertir en acción climática. Es un avance”, subraya Guzmán.El caso PetroGustavo Petro, desde que tomó la presidencia de Colombia, ha expresado su interés en las cuestiones ambientales, y también en cómo financiar los proyectos encaminados a cumplir el Acuerdo de París.“El presidente Gustavo Petro de Colombia ha sido un vocero muy importante para generar nuevos mecanismos de financiamiento. ¿De dónde vamos a sacar más ingresos? Esto, por ejemplo, viene a través de esquemas de tributación. Internacionalmente se ha hablado de que hay que hacer tasas, por ejemplo, a los que más contaminen, a los que más ganan, a los que más emiten...”, comenta la experta.“El presidente ha sido muy enfático en generar estos nuevos mecanismos innovadores que permitan ampliar aún más la recaudación de recursos que permitan a su vez reinvertir en acción climática”, recalca.En la COP 27 de Egipto, Gustavo Petro calificó a las conferencias sobre el cambio climático como un fracaso, pues nadie se compromete a dejar de consumir energías fósiles.