Seis años han pasado desde que Colombia firmo el Acuerdo de Paz con las fuerzas guerrilleras de las FARC. El pasado 26 de noviembre diversas actividades de conmemoración se realizaron desde el actual gobierno y en comunidades que se vieron afectadas por esta larga etapa de violencia. Nuestra enviada especial a Colombia, Angélica Pérez conversó en exclusiva con Carlos Ruiz Massieu, representante especial del Secretario General y jefe de la Misión de Verificación de las Naciones Unidas en Colombia, quien hizo un balance de estos años de paz y del trabajo que aún queda por realizar para consolidar este periodo de calma. Asimismo, destacó la voluntad política del gobierno del presidente Gustavo Petro por extender el dialogo hacia otras guerrillas como ELN (Ejército de Liberación Nacional). ¿Usted hace un balance positivo de la implementación del acuerdo? Es un balance positivo, ha habido importantes elementos que ya se han consolidado, el tránsito de una guerrilla a un partido político que participa activamente en las instituciones democráticas del país. Se mantienen más del 90% de los ex combatientes en el proceso de reincorporación, cerca del 70% están vinculados o han estado vinculados a un proyecto productivo. Más del 50 % de los acuerdos de paz no llegan a un sexto año. Entonces es un motivo de celebración. ¿Cuáles son los retos que aún quedan de este acuerdo? Evidentemente también hay muchos retos. Sobre todo, en las áreas más transformadoras del acuerdo: la reforma rural, la reforma política, el capítulo étnico, temas de género. La arquitectura del acuerdo ha avanzado mucho, tanto los órganos derivados del acuerdo, como el sistema transicional que ha sido también una piedra angular en estos años. La comisión de la verdad termino sus funciones quedo un comité para darle seguimiento a las recomendaciones de la comisión, la unidad de búsqueda ha tenido resultados importantes y obviamente la jurisdicción especial para la paz donde también ya han avanzado muchos de sus casos, ha habido audiencias públicas muy importantes en las cuales se ha llegado a resultados históricos como el reconocimiento público de crímenes de guerra, crímenes de lesa humanidad tanto por los ex combatientes como por la fuerza pública. También nos anima mucho que el actual gobierno tiene en sus prioridades la implementación del acuerdo dentro de su política de paz, que el presidente Petro se encuentra impulsando. ¿En estos tres meses de gobierno cuanto se ha avanzado en la implementación del acuerdo de paz? En estos 100 días hemos visto avances muy importantes y resultados concretos. Lo primero es la voluntad política expresada por el gobierno de tener una consolidación de la paz en toda Colombia. El acuerdo de paz y su implementación es una piedra angular, en la parte legislativa han avanzado primera la propia ley, en un proyecto para que la política de paz sea una política de estado, también en materia agraria, en materia rural han avanzado proyectos y también en materia de reforma política. La comisión de seguimiento impulso y verificación del propio acuerdo entre las partes se ha reactivado, también se ha reactivado la comisión de garantías de seguridad, el mandato es muy importante porque tiene que derivar en una política pública de desmantelamiento de organizaciones criminales. Ya se reactivó el consejo nacional de reincorporación de ex combatientes para también hacerla sostenible, para poder seguir avanzando en temas de tierras y viviendas para ex combatientes de dar asesoría técnica de garantizar acceso al mercado. ¿Qué otra iniciativa destaca del gobierno? Adicionalmente medidas de seguridad que se han generado primero un plan de choque que se hizo en los primeros días del gobierno además de la política de paz que tiene otras iniciativas que son importantes para la consolidación de la paz y en general para la reducción de violencia. También hay una clara intención de avanzar en los temas profundos del acuerdo de paz como reforma rural, capitulo étnico, al punto que se han solicitado la verificación del avance de estos temas y es lo que denota la voluntad política de este gobierno. Junto con otras iniciativas como diálogos con el ELN, diálogos como para explorar tanto sometimiento, como acogimiento a la legislación. Estas medidas esperamos que si puedan reducir la violencia en las comunidades. Sin duda, existen muchos desafíos, pero confiamos que, a través del tiempo, se puedan seguir tomando medidas concretas para que este acuerdo siga siendo un ejemplo para el mundo como lo ha sido hasta ahora y aunado a otras iniciativas de paz, puedan consolidar la paz en todo el territorio colombiano.