Los Gobiernos de Colombia y de Panamá están en la mira de la ONG Human Rights Watch quien publicó este miércoles un informe de 120 páginas denunciando la inacción o los malos pasos de Bogotá y Ciudad de Panamá, en cuanto a la protección de los migrantes varados o perdidos en la selva fronteriza del Darién. En 120 páginas y tras una investigación de dos años, las conclusiones de Human Rights Watch alertan sobre la actitud de los Gobiernos de Colombia y de Panamá, que no cumplen con su obligación de proteger a los migrantes que pasan por su suelo y que sufren una caótica situación en los 266 kilómetros de selva que separan los dos países.Menores y mujeres, los más expuestos“En Colombia no hay una estrategia clara para asistir y proteger a los migrantes que sufren todo tipo de atropellos y abusos en el Tapón del Darién, que quedan expuestos al Clan del Golfo, una organización narcotraficante que se profita de estos vulnerables migrantes y solicitantes de asilo. Y en Panamá la estrategia es de flujo controlado, como ellos la llaman. Es una estrategia que busca que los migrantes se vayan lo antes posible, que lleguen lo antes posible a Costa Rica, y que hace muy pocos esfuerzos por garantizar los derechos de los menores no acompañados, por buscar a las personas desaparecidas en la selva y por judicializar a los responsables de casos constantes de violaciones y abusos sexuales en contra de las mujeres y niñas que cruzan el Tapón del Darién”, detalla para RFI Juan Pappier, uno de los investigadores de Human Rights Watch.El investigador subraya además que “los casos que más nos preocupan son los de los menores. Cientos de ellos van no acompañados o se separan lamentablemente de sus familias durante el trayecto y quedan abandonados a la deriva, expuestos a todo tipo de abusos. También nos preocupa lo que ocurre con las mujeres. Médicos Sin Fronteras ha dado asistencia a más de 1.300 mujeres que en los últimos años denunciaron hechos de violencia sexual al cruzar la selva. Creo que esos son los casos más preocupantes que requiere una respuesta urgente por parte de las autoridades colombianas y panameñas”.“Mecanismo de búsqueda”¿Qué recomendaciones hace Human Rights Watch? “Tiene que ver primero con nombrar un alto funcionario, un asesor a cargo de la estrategia para el Tapón del Darién, que pueda garantizar la cooperación entre los dos Gobiernos. Ninguno de los dos puede responder por sí solo, de forma aislada a un fenómeno tan complejo como el que se vive hoy en esa frontera”, contesta Juan Pappier.“También creemos que hay que crear un mecanismo de búsqueda de las personas desaparecidas, para intentar rescatarlos o al menos rescatar los cuerpos de las personas que mueren en la selva. Fortalecer de forma conjunta la capacidad forense, la estrategia de persecución penal para judicializar a las bandas criminales que operan en esta zona y que abusan de estos migrantes que están arriesgando su vida en la selva”, concluye el investigador.